Cap.16: "Dudas..."

-¡¿Bill?!- gritaron las chicas saltando de la cama. Gaby hizo señas para que callasen

: Conexión telefónica:

-Hola Gaby…-

-¿Qué haces con el celular de Mirge?- preguntó graciosa

-Estoy con ella aquí y apenas llegó tu mensaje le pedí para hablarte yo ¿No te molestas?- hizo su voz un poco más tierna como el de un niño miedoso

-Estoy más que feliz por escucharte de nuevo…- la voz de Gaby se tornó ronca

-Quiero verte…- suspiró

-También yo…-

-¿Volverás pronto a L.A.?-

-No lo sé, apenas he llegado. No hay ningún plan de viajar de nuevo…-

-Haz un plan en el que yo sea el objetivo- rió. Gaby cerró los ojos tratando de imaginarse esa risa.

-Te prometo que haré todo lo posible. Bill…mmm…-

-¿Qué pasa?-

-¿Por qué estás ahí con Mirge?-

-Vine a visitarla. Ya estamos de vuelta a L.A. y la ayudo a buscar departamento…-dijo inocente

-Entiendo… Ah! Ahora que recuerdo, haré un viaje…-

-¿Enserio? ¿A dónde?- preguntó emocionado

- A Brasil… en Enero. Por fin de curso…-

-Aun falta para enero…-

-Pero ya es algo… Quizás… cuando la segunda parte de mi libro se publique pueda viajar de nuevo y visitarte…-

-Gaby yo no quiero que me visites… Yo…- dudó un poco –Quiero que vivas aquí, quiero tenerte cerca de mí siempre…-

Las manos de Gaby temblaron casi echando el celular –Eso… debemos hablarlo otro día- ambos suspiraron nerviosos

- Como quieras… ¡Espera Mirge! –

-¿Qué pasa?-

-Mirge quiere hablarte…-

-Es mi turno Bill… Hola Gaby-

-Hola…-

-¡¿Acaso querías desaparecer o algo así?!...-

-No empieces, ya te explique que tuve problemas con el celular. Ahora pásame con Bill…-

-¿Qué? Es mi celular y… ¿me cambias por él?…-

-Por favor…- pidió Gaby

Mirge suspiro –Esta bien, pero luego nosotras debemos hablar…-

-Sí, gracias…-

-¡Bill! Quiere hablar contigo. Ya se nota que me cambió…- ambos rieron

-Hola de nuevo…-

-Hola... Bill…- fue interrumpida

-Gaby quiero hablarte desde mi celular, hoy por la noche y mañana y…- Gaby rió

-También yo…-

-Guardaré tu numero y hablamos más tarde…si?-

-Está bien…-

-Mirge se está volviendo loca, le preocupa su crédito- rieron

-Ya devuélvele su teléfono…-

-Adiós…-

-Adiós, cuídate…- hubo un silencio

-Te amo…- dijeron en coro para luego sonreír.

Gaby terminó de hablar para luego mirar a sus amigas que estaban quietas, sin decir ninguna palabra -¿Qué sucede?- preguntó sin cuidado

-Puede que yo no entienda el inglés, pero ella sí…- dijo señalando a Violeta

-¿Y?-

-¿Y? ¡¿Y?! Con quien estabas hablando era… era-

-Era…era…- dijo en broma

-¡Gaby! Es enserio…-

-No se enojen…-

-Dijiste Bill… era ¿Bill?- ambas amigas esperaban ansiosas la respuesta

-Que les importa…-

-¡Era él!- dijo saltando feliz Violeta

-Yo no dije nada…-

-Lo sé por cómo te pones nerviosa…- Violeta lanzó un grito

-¡No grites!- dijo Gaby tapándose los oídos.

No había de otra, ella tuvo que contarles todo lo que había pasado. Por un momento la duda volvía y parecía querer guardar toda la historia pero luego recordaba que ellas 2 se merecían saberlo… siempre estuvieron ahí cuando la melancolía de tenerlo lejos la afectaba. Tres años soportando a alguien como ella era difícil, y ellas dos lo habían logrado.

…….

-Este me gusta…- dijo Mirge mientras recorría la habitación del departamento

-¿Elijes este?- preguntó Bill mientras se recostaba por la puerta

-¡Sí!- dijo decidida.-Te agradezco que me hayas acompañado…-

-No es nada…- le regaló una sonrisa

-Bill, tengo que decirte algo…- dijo sentándose en una de las sillas del comedor

-¿Qué sucede?- preguntó preocupado Bill mientras imitaba lo hecho por Mirge

-Bueno… me ofrecieron un trabajo y la verdad es que voy a ganar muy bien pero es en una empresa… una empresa de espectáculo…- Bill escuchaba atentamente

-Entiendo… y ¿Qué trabajo harás ahí?-

-Las ediciones, de los programas y bueno… ediciones de fotos-

-Genial…- dijo Bill sonriendo.

-Sólo quiero que quede claro que no voy a hablar de ustedes…-

-Lo sé… ¿Era eso lo que te preocupaba?- preguntó tranquilamente

-Sí… Que quede claro que no voy…- Bill tomó la mano de Mirge que estaba temblando

-Ya… No dirás nada. Lo entiendo- se puso de pie –Debes a hablar con la encargada de este lugar…-

-Sí…-

-Debo irme. Tom debe estar molesto, no le avisé que saldría…- abrió la puerta

-Adiós Bill… Ten cuidado con los paparazis- Bill se había marchado, mientras Mirge terminaba de comprar el departamento

<<Esto es ridículo… Yo… ¿comprando un departamento?>>

…..

Alemania, Berlín…

-¿Un departamento? ¿Estás hablando enserio?- preguntaba Ivi a la par que reía. Sentada frente a la ventana que daba a la cuidad que ahora se cubría de nieve –No puedo creerlo… Cambiando de tema, hay algo que no te he contado…- tocaron la puerta –Te dejo... te hablo más tarde…Adiós Mirge-

-Hola Ivi…- saludó abriendo un poco la puerta

-Te estaba esperando…- dijo con una gran sonrisa

-¿Nos vamos?-

-Claro…-se acomodó el abrigo y se dispuso a salir -¿A dónde vamos?-

-Tú decides…-

-Me debes el paseo por el boulevard, lo recuerdas Georg?- dijo riendo.

-Oh… es cierto- miró su reloj –Ahora son las 5… ¿quieres ir?-

-Claro… ¿Estás seguro que quieres ir?-

-Sí, ¿Por qué no?-

-Bueno… la otra vez pareció no agradarte mucho el lugar…- dijo vacilante.

-Me gusta…- respondió al igual que ella, vacilante. Caminaron hasta el auto de Georg, Ivi quedó mirándolo mientras conducía

-Hermosos ojos…- dijo sonriendo mientras desviaba su mirada hacia la ventana. Él sonrió

-¿Dijiste algo?- Ivi reaccionó

-¿Qué…? No…- respondió nerviosa

-Creí escuchar algo…-

-Yo no dije nada…-

-Si eso dices…- ambos sonrieron

-Solo dije la verdad…- dijo Ivi después de unos minutos. Georg se limitó a reír… para deleite de Ivi.

-Ya está oscuro y eso que apenas son las 6…- dijo Ivi mientras bajaba del auto

-Mejor… así ya lo verás…- dijo señalando con un movimiento de cabeza. Ivi volteó y se encontró con el boulevard Unter den Linden pero esta vez lucía diferente

-Esto es hermoso…- susurró.

-Te dije que de noche es aún más hermoso- Georg caminó un poco -¿Iras?- preguntó riendo ante la actitud de Ivi quien permanecía quieta y fascinada

-Ah? Sí…- dijo siguiéndolo

………

-¿Qué quieres qué?- preguntó el chico de lentes algo alterado mientras bajaba su vaso con agua

-Quiero volver a mi país… por lo menos por un tiempo- dijo Claudia mientras desviaba la mirada para otro lado.

-¿Por cuánto tiempo?- preguntó serio mientras volvía a llevar el vaso con agua a la boca

-Lo suficiente… quiero pasar un buen tiempo con mi familia-

-Yo voy contigo…- dijo Gustav mientras volvía a bajar el vaso

-Tú estás muy ocupado con la banda… No podrás-

-¡Es verdad…! No puedes irte con todo esto de la gira…- dijo llevándose el vaso a la boca

-Ya pedí permiso… ¿¡Podrías dejar de hacer eso, Gustav!?Ya ni siquiera tienes agua en ese vaso- dijo algo nerviosa

-Tranquila…- bajó el vaso para dejarlo finalmente sobre la mesa –Entonces… Por lo menos dime por cuánto tiempo-

-Un año…-

-¿¡Un año!?- se alteró

-Habla más despacio… Estamos en un restaurant – le recordó la morena

-Eso es mucho…-

-Comprende, hace casi dos años que no veo a nadie de mi familia…-

-Comprendo, pero… ¿Segura que esa es la razón por la que quieres ir?-

-Qué razón podría…- lo miró sorprendida -¿Qué estas pensando?-

-Yo nada…- dijo nervioso

-¿Acaso estas desconfiando?-

-Es que Claudia… Te vas por un mes y yo ni siquiera estaré cerca-

-¡Gustav no estás confiando en mí!- dijo algo alterada y sorprendida

-Confío en ti pero no en ese amigo que vino a visitarte…- dijo inclinando la cabeza

-No puedo creerlo…- dijo Claudia pasándose la mano entre su cabello –No estás confiando en mí…- volvió a repetirle

-En ti sí… pero ese amigo te miraba distinto…-

-Ese amigo no importa ahora… Tú sabes que…- se cruzó de brazos apoyándose por la silla

-Pero yo no iré contigo y ese se acercará…-

-Suficiente… No confías en mí y eso no es justo. Nunca te di motivos- dijo levantándose y caminando hacia la salida

-¡Claudia!- Gustav se levantó pero antes dejó unos billetes sobre la mesa

Ambos estaban en la puerta

-Perdóname…- dijo Gustav acercándose

-Guss...- Claudia dio vuelta para mirarlo –Regresaré a Paraguay, aunque te moleste…-

-Pero si no me molesta…-

-Y nos daremos un tiempo…- hubo un silencio

-¿Un tiempo?- preguntó después de unos segundos Guss –Apenas y empezamos…-

-Llevamos 1 año y 3 meses… Si quieres te puedo decir con hora y minutos- dijo Claudia al borde de las lagrimas -Y ni siquiera confías en mí…-

-¡Confío en ti! Pero no quiero que te vayas sola, teniendo a ese “amigo” cerca…-

-¿Ves? No estás confiando en mí y también eres sobreprotector. Siempre me acompañas a todos lados. Dime tan sólo un lugar en dónde no me has acompañado…-

-No exageres…-

-No exagero. Es la verdad, a veces te comportas más como mi padre que como mi novio…-

-Claudia…- no encontraba las palabras adecuadas

-Es lo mejor… Guss-

-Acaso ya murió ese “amor” que me profesabas cuando nos conocimos- hizo señas de comillas en la palabra amor. Lo que hizo a Claudia sentirse devastada, giró y comenzó a caminar -¡Detente!- dijo Gustav reteniéndola del brazo. Claudia se soltó bruscamente

-Ahora dudas de…- Claudia se trababa por culpa del nerviosismo mezclado con tristeza - ¿Cómo puedes pensar que yo dejé de amarte? –

-Me estas pidiendo que nos demos un tiempo…. ¿Qué quieres que piense?-

-Bueno, entonces ese “amor”- hizo lo mismo que Gustav – como tú lo dices… nunca existió!- siguió caminando

-Ya sabía yo que era un simple amor de fan…-

Al oír estas palabras, lágrimas comenzaron a rodar por la mejilla de Claudia. Pero ya no volvería, ya no. Si él creía eso… ella no lo obligaría a creer otra cosa.

>>Si supieras que te sigo amando tanto o más que antes mi superstar<<

-Adiós…- Claudia se secó las lágrimas – Para siempre…-