Cap.5: Tom...

Después de la comunicación telefónica, Mirge se reunió lo antes posible con el decano. No iba a poder decir que no, confiaron en una extranjera para que representara a la universidad y ella tenía que demostrar que no estaban equivocados en darle esa responsabilidad

-Entonces… ¿Cuándo viajo?- preguntó mientras posaba sus manos sobre el escritorio

-En 2 días-

-¿Dos días?-

-Sé que es un poco apresurado pero estas preparada, además allá te explicaran mejor de lo que trata-

Lanzó un suspiro –Está bien-

Esos días pasaron muy rápido, Mirge se preparó lo más que pudo y se comunicó con su familia. Era hora de viajar a una ciudad que le causaba mucha ansiedad, con tan sólo decir el nombre

Bajó del avión y empezó a buscar a su guía, cuando la encontró se alistaron para ir al hotel que sería su hogar temporalmente

Mirge buscaba con la mirada a alguien, quería saber si tendría la misma suerte de su amiga pero ya iban saliendo y no… no tuvo la misma suerte

>>Ya se habrán marchado a Alemania<< se dijo a sí misma

En el taxi, entablar una conversación con Mirge le resultó difícil a la joven guía, Cloe. Estaba tan sumergida en sus pensamientos con la cabeza recostada a la ventana y su mirada hacia los enormes edificios, publicidades, arboles desnudos a causa del frío que azotaba a ese país… a lo lejos ese cielo cubierto por nubes grises que no dejaban ver ni un poco de azul, ese cielo azul que combinaba con el mar y se complementaba con el sol y las palmeras, al menos así era mostrada la ciudad de L.A. en las fotos. Pero a ella le había tocado conocer esa ciudad en su fase fría y abrumada de nieve

-¿Eres de Venezuela, verdad?- preguntó al fin Cloe, la guía quien quería conversar pero no se animaba, era americana, de aproximadamente 25 años, de tez blanca pero con un rosado suave en sus mejillas

-Sí- respondió Mirge, no sabiendo cómo continuar la conversación

-¿Y cómo es tu país? Siempre quise visitar un país donde se habla español- dijo sonriendo

Mirge le contó algunas cosas y por lo menos logró mantener la conversación hasta llegar al hotel

-Esta es tu habitación, ojalá sea de tu agrado- dijo mientas abría la puerta –Te dejo para que te acomodes y recuerda que tienes una reunión a las 5 de la tarde- dijo amable y sonriente

-Sí, no lo voy a olvidar… Gracias-

-No hay porqué- dijo saliendo y cerrando la puerta tras ella

Mirge desempacó y acomodó las tres fotografías. Se tiró a la cama y miró el reloj

>>10:25, aun falta para esa reunión. Bajaré a ver qué hay por los alrededores<<

Se abrigó y se dispuso a visitar algunas tiendas que estaban cerca del hotel. Se dirigió hacia una tienda de ventas de lentes

>>Con este frío, veo difícil que alguien compre lentes de sol… Si estuviera por Latinoamérica, sí, pero aquí… y con este frío, pero estos están hermosos<<

Quedó mirando la vitrina desde afuera, no le pareció necesario entrar, puesto que no compraría nada

>>Estaría bueno llevar algunos de recuerdo, digo… para decir que los compré costosos<< sonrío por lo pensado >>Creo que soné como fresa<< volvió a sonreír. Los pensamientos que le estaban ocasionando risas solitarias y silenciosas fueron interrumpidos por unos golpes a la vitrina tratando de llamar su atención>> ¿Me estaban oyendo reír sola?<<

Con mucha vergüenza levantó la vista de los lentes hacia el observador de sus risas solitarias y se encontró que la persona quien la estuvo acompañando en sus pensamientos que la hacían reír, era un rostro muy familiar quien la miraba con una sonrisa plasmada en él

-¿Te causa risa estar afuera con ese frío?- dijo riendo del otro lado de la vitrina

Mirge se paralizó por completo y sintió como sus manos empezaban a sudar

>> ¿El frío me está afectando?<<

Ella lo miraba sin poder pronunciar absolutamente nada, a él parecía causarle gracia verla así

-¿Te congelaste?- preguntó sin borrar su risa medio pícara

Mirge lanzó una risa nerviosa, mientras evitaba mirarlo a los ojos, cuando volvió a alzar la mirada, él ya no estaba… se esfumó, como las estrellas desaparecen cuando sale el sol, él desapareció cuando terminó el sueño.

>> ¡No! Parecía todo tan real… Vuelve, no quiero despertar… Mi amor, mi vida permíteme estar en ese sueño un momento más…<<

[Leer con http://www.youtube.com/watch?v=kDSz-GSNrTE si termina, vuélvanlo a poner n_n]

Sintió una respiración muy cerca de su cuello, un suspiro que penetró por su piel, recorrió sus venas, se mezclo con su sangre y llegó a su corazón haciendo que éste empezara a latir alocadamente. Ese suspiro hizo que el mundo ya no importara, hizo que la emoción de ver nieve sea una pequeñez, hizo que olvidara el motivo por el cual estaba en aquella ciudad… todo, absolutamente todo estaba borrado… era él, entonces… ¿Qué importaba lo demás?

-¿Creíste que me había ido?- dijo haciendo un movimiento con el piercing que tenía

-Algo por el estilo…- dijo Mirge tratando de tapar su nerviosismo

-Solo salí porque no me gustaba hablar a través de un vidrio- dijo sin quitar los ojos de encima a Mirge. Ella evitaba mirarlo a los ojos y no pronunciar lo que su corazón quería gritar

-Oye… ¿Por qué estás aquí? .Hace mucho frío-

-Sólo salí a mirar y conocer el lugar…- respondió Mirge – ¿y tú?

-Mi hermano quiso comprar unos lentes antes de viajar…entonces…-

-¿Bill también está aquí?- preguntó pero apenas terminó la frase se llevó la mano tapándose la boca y mirando de nuevo a otro lado. El rió

-Con que nos conoces... ¿Eh?-

-Sí… creí que no te darías cuenta- dijo sonriendo normalmente

>>Ya no estoy tan nerviosa… bueno tal vez un poco<<

-Lo sospechaba…-

-¿Por qué?-

-Porque no creo que te hayas quedado helada por la nieve cuando me viste y porque tus manos…están sudando- dijo riendo

-Ok… me descubriste, Tom!- dijo sonriendo. Esa era una escena que jamás pensó en vivir, estaba viéndolo reír y ella sonreía junto a él. Pronunció su nombre y esta vez...Era él quien la escuchaba.

-Entonces… ¿Eres fan?- preguntó Tom

-Sí, amo la banda-

-Genial! Y ¿De dónde eres? Tu acento no es de aquí-

-Soy de Venezuela ¿Viajan a Alemania, verdad?-

-Wow… sí eres fan- dijo sonriendo – Sí… daremos unos conciertos ahí-

-Lástima que vine para aquí- dijo sonriendo de lado

-¿Acaso estabas en Alemania?-

-Sí, por una beca de universidad… Esperaba ir a su concierto en Berlín pero me eligieron para una reunión aquí… así que…- dijo cabizbaja

-¿Aún no fuiste a nuestro concierto?- preguntó sorprendido

-¿Ya fueron a Venezuela?- dijo repitiendo el mismo tono de voz que Tom

-No… pero intenta ir a unos de estos conciertos… ¿Hace cuando que eres fan?-

-Hace más de 4 años…-

-Entonces, te mereces ir!... –acercándose lentamente a ella –Además te quiero ver ahí…-

El solo hecho de hablar con él ya hacía que su corazón enloqueciera, y cuando él se acercó a ella:” alocado” era muy poco para describir cómo latía su corazón en ese instante.

Posó sus manos en el pecho de Tom y lo hizo retroceder un poco

-“4 años” no te parece suficiente como para conocer sobre tu reputación- dijo sonriendo de lado y por primera vez mirándolo directamente a los ojos. Sus miradas se encontraron y no se separaron durante unos segundos.

>>Es hermoso…<<

Él desvió la mirada, sonriendo – Trata de ir… te mereces un concierto-

-Trataré… Me tengo que ir y además…creo que sí me congelaré- dijo medio tiritando

-Eres simpática…- dijo riendo

-¿Sólo porque me voy a congelar?-

Volvió a reír –No, no sólo por eso… tienes una sonrisa contagiosa-

Después de eso hubo un silencio, ella quedó un poco avergonzada y él no sentía ni un poco de vergüenza con lo dicho

>>Parece que te acostumbras a decir eso a muchas… y vaya que funciona!<<

-Me dices… ¿Quién es tú favorito?- preguntó Tom con una sonrisa pervertida

-¿Y para que quieres saber?- respondió con una pregunta

-Curiosidad…- dijo encogiéndose de hombros

Sonó el celular de Mirge. >>Un mensaje recibido. Gracias<<

-Debo irme…- dijo casi solloza

>>No quiero irme… Es mejor pedirle un autógrafo y una foto, no como Gaby que se escapó<<

-Está bien…Me debes esa respuesta. ¿Me permites darte un autógrafo y una foto?- preguntó riendo

-¿Ahora los artistas ofrecen autógrafos y fotos?- dijo arqueando las cejas y sonriendo

-Es un regalo… de mi parte- dijo golpeándose su pecho

-Está bien, tampoco te golpees- dijo riendo y preparando su cámara en su móvil - ¿Quién nos tomará la foto?- apenas pronunció todo esa frase y su móvil desapareció de sus manos

-Yo!- dijo Tom mientras se levantaba y enfocaba la cámara hacia Mirge

-Bueno… Pareciera que nunca tomaste una foto por eso estas tan emocionado- dijo riendo

-No es eso, siempre nos toman fotos otras personas o las fans mismas, ahora quiero tomarla yo!- dijo con gran orgullo

-Bueno, nuevo fotógrafo… toma la foto!- dijo riendo y sintiendo un flash de luz -¿Qué fue eso?- preguntó inquieta

-¿Qué cosa?… espérame. Bill ya habrá salido por la otra salida, voy a decirle que ya voy- decía mientras tecleaba su celular

-Lástima, no vi a los demás… y Bill estaba cerca- dijo susurrando

-¿A caso él es tu favorito?- preguntó frunciendo un poco el ceño

-Te dije que no te contestaría eso…- dijo tranquila. Ella sabía muy bien quien era su superstar favorito

-Como quieras… Bueno- caminó hacia la vitrina- Aquí nos tomaremos la foto-

-¿Y ahí porque….? –

-Aquí me viste, no? Entonces es un buen lugar-

Mirge se acercó a él, pero quedó un poco distante– Bueno… - fue interrumpida

-Es para que ambos estemos en la foto…- tomó del brazo a Mirge, la acercó más, pasó su brazo por la cintura de ella y la pegó a su cuerpo. Mirge lo abrazó por su cintura, su perfume que la llenaba de gozo, su brazo pegado a su espalda por un momento hicieron que casi perdiera el control y le gritara esas 2 palabras bien guardadas. No quería despertar…no

>>Dame una fotografía para pegarla a mi pared, dice aquella canción<<

-Sonríe- dijo Tom mientras un flash de luz se dejo ver

-Quiero verla!- dijo Mirge sacándole la cámara

-Yo también!- dijo, ahora quitándola él

-Me encanta…- susurró

-A mi igual. Ahora tu autógrafo ¿Tienes una hoja?-

Mirge buscó en sus bolsillos y encontró una factura de una maleta nueva que había comprado

-Aquí tienes…- dijo pasando el papel mientras Tom sacaba un bolígrafo de su chaqueta

-Vienes preparado…-

-Por supuesto…- pegó el papel a una pared y comenzó a escribir- Oye…-

-Sí?-

-Hay un problema…- dijo serio, lo que preocupó a Mirge

-¿Qué pasa?-

-Emmm… bueno…me dices tu nombre?- dijo con un sonrisa inocente. Mirge sonrío

-Mi nombre es Mirgenis, pero escribe Mirge-

-Me deletreas?- dijo riendo –Es un nombre raro…-

-M-I-R-G-E… y aclaro… no se pronuncia MirYe –

-Aclarado- continuó escribiendo –Aquí lo tienes-

-Gracias… ahora creo que sí me voy-

-Quiero que estés en el concierto…-

-Intentaré- dijo sin mucha esperanza – Adiós…- dijo al borde de las lágrimas

>>No lo veras más, aprovecha ahora<< Lo miró atentamente y posó sus brazos alrededor se su cuello y lo abrazó. Tom correspondió a su abrazo y la acercó más a él

>>No llores… No llores<<

Una lágrima se deslizó por su mejilla, hizo lo posible para que Tom no lo notase pero no lo logró

-¿Estas llorando?- le preguntó susurrando al oído. Ella sólo sonrió y susurró – Admiro a los 4 como músicos pero… ¿sabes? …Tú eres mi favorito- apenas pronunció esa frase, se alejó de él y aceleró el paso. Tom sólo quedo sonriendo, como si escuchar eso era lo más normal

Mirge caminaba rápido y a la vez lloraba, sacó la hoja autografiada y comenzó a leer

“Para Mirge: Debes de estar en uno de los conciertos! Gracias por ser una fan desde hace mucho tiempo! Cuídate! Ah… y yo soy tu favorito, lo sé haha…Tom”

>>Sheissed… ¿para qué te lo dije?<< esbozo una sonrisa de rabia y alegría al mismo tiempo

Llegó al hotel y se lanzó a la cama

-Lo vi!!!... lo vi!!- gritaba saltando en la cama – No puedo creerlo…- se arrojó de espalda y cayó sobre unas almohadas, inclinó su cabeza, miró la foto de Tom y empezó a reír. El mundo había cambiado para ella, su felicidad se podría notar apenas se la miraba – Te amo… Tom- susurró

-Lamento no habértelo dicho, pero seguro lo notaste- la sonrisa no se le borraba del rostro. Su celular empezó a sonar

: Conexión telefónica:

-Hola…-

-Mirge, soy Gaby!-

-Pálida! Te tengo que decir algo…-

-¿Qué fuiste a L.A y no me lo dijiste?-

>>Olvidé decírselo… <<

-Bueno, eso y que…-

-Llamé a la universidad preguntando por ti, y me dijeron que estabas ahí y que cambiaste tu numero! Acaso te escondes de mi o qué?-

-No digas eso…-

-¿Entonces por qué demonios no me dijiste nada?-

-Porque todo pasó muy rápido y no pude hablar con nadie excepto con mi mamá…-

-Sí… seguro – dijo sarcástica

-Sarcástica-

-¿Qué?-

-Nada…- dijo medio riendo

-Nada…- dijo remedándola

-No me remedes!-

-No me digas sarcástica!-

-Ok… pero Gaby te tengo que decir algo-

-Me lo dirás mañana, vuelvo para L.A.-

-Enserio?-

-Sí pero solo por 2 días-

-Voy al aeropuerto a esperarte ¿A qué hora llegas?-

-Como a las 3 de la tarde… Ah te llevo una sorpresa-

-¿Qué sorpresa?-

-Menos mal es “sorpresa”- rió

-Está bien… Nos vemos-

-Sí, cuídate-

: Fin de conexión telefónica:

-Si no avise a Gaby…- se llevó la mano a la cabeza –Ivi…!!- dijo tomando su celular

>>Acuérdate del número… acuérdate!!<< Quedó pensando un momento y luego marcó

-Hola… Ivi?-

-Sí, soy yo… ¿Quién habla?-

-Soy yo, Mirge! ¿Cómo estás?-

-¿Mirge? Te desapareciste, te esfumaste de Alemania y ni siquiera te dignaste a decírmelo!- dijo furiosa

-Sí… perdona, fue todo tan rápido que no pude contárselo a nadie, enserio discúlpame-

-No hay problema… Todo esto de la universidad nos tiene muy alejadas de todo-

-Sí, pero hay algo que quiero contarte…-

Mirge contó su sueño hecho realidad a Ivi, ambas gritaron y lloraron

- Gaby, Tú y ahora sólo falto yo… estoy segura que voy a ver a Georg! Porque iré al concierto en Berlín!-

-Iras? Qué suerte, este viaje me quitó esa posibilidad…-

-Pero te regaló algo más…-

-Sí…-

Después de la conversación, Mirge se preparó para la reunión. La reunión de ese día sólo consistía en presentaciones nada importante aún

-¿Eres de Venezuela?- preguntó alzando una ceja, una joven alta y muy flaca

-Sí… Mi nombre es Mirge- se presentó Mirge, ya cuando ambas iban saliendo

-El mío es Liz. Y soy de Italia- dijo con un poco de soberbia

-Es un lindo país…- fue interrumpida

-Sí, lo es. Lamento no decir nada de Venezuela, nunca escuché algo bueno de ese país- dijo riendo por lo bajo. Mirge la miró atentamente

-¿Tienes algo en contra de mi país?-

-No, solo te digo la verdad- dijo acomodando su larga cabellera rubia

Mirge dio vuelta y emprendió su camino, sin despedirse de su nueva conocida. Quien se mostraba como alguien que acarrearía problemas.

Fue a un laboratorio de fotos y volvió al hotel. Se sentó en la orilla de la cama y tomó el portarretratos que contenía la foto de Tom. Sacó esa fotografía y puso una nueva, una foto que le hacía sonreír con tan solo mirarla.

Guardó la foto vieja en su cartera y la nueva ya lucía en el silencioso cuarto que sólo era alumbrado por la luz de mesa, los típicos ruidos de una ciudad tan movida como L.A. se escuchaban pero parecían perdidos a lo lejos. Mirge se cubrió del frío y de dispuso a dormir

>>El sueño se cumplió<< Miró atentamente la foto y luego apagó la luz. Las luces de la ciudad alumbraban esa foto, en el silencio… esa foto que mostraba el día más feliz de una fan que conocía a su superstar… la foto de Mirge y Tom.